El País, en "Sangría imparable" señala que "a pesar de la esperanza suscitada por las primeras elecciones pluralistas en 50 años, nadie de buena fe puede asegurar que las perspectivas para la democratización del antiguo feudo de Sadam Husein sean hoy mucho mejores que hace unos meses" y añade que "tras dos años de ocupación estadounidense y varias decenas de miles de millones de dólares gastados, en Irak sigue sin forjarse un compromiso de convivencia entre sus principales facciones étnicas y religiosas"

¿Un editorial que cuestiona la libertad, la democracia, la civilización frente al terror?
El 11 de marzo de 2004 una sangría mayor conmocionó nuestra democracia. Acababa de reflexionar sobre el tema pensando que aquella criminal actuación rompió nuestra libertad, y parece que El País me da la razón. La libertad y la convivencia pacífica son imposibles para la izquierda radical, para la izquierda.