El miserable precio de doce vidas en Marruecos

Que se entere el alianzador Rodríguez, si todavía es capaz de valorar la dignidad de las personas humanas -sí, personas humanas-, del valor de una vida humana en la patria de su amigo Mohamed VI.
Una estrategia formidable, digna de quedar imborrablemente reseñada en su cuaderno de extratégias: las mafias organizadas, en esa potencia amiga que es Marruecos, provocan un naufragio en las proximidades de Tánger para posibilitar la entrada de otra patera. Que haya 12 muertes, la mitad de ellos niños, es un mal menor; algo sin importancia.