2005-07-28

Carta abierta a la Ministra de Educación

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Excma. Sra.:


El pasado viernes, 23 de Julio de 2005, el Consejo de Ministros aprobó el proyecto de la LOE, la norma educativa más mediocre y menos consensuada de toda la democracia. Esto es especialmente grave porque afecta a la formación de nuestros hijos, algo con lo que no permitimos que ni Vd. ni el presidente de Gobierno jueguen o hagan experimentos.

Tenía Vd. la responsabilidad –ya que su Gobierno suspendió la ejecución de la Ley de Calidad- de elaborar una ley mejor, con mayor consenso, que homologara el sistema educativo, prestigiara el papel del profesorado, fomentara la participación de la familia, elevara la calidad de la escuela pública, protegiera la pluralidad y libertad de enseñanza y, sobre todo, que terminara con el fracaso escolar que padece nuestro país desde la LOGSE.
Resulta obvio que no lo ha conseguido y que la LOE es un auténtico fiasco, un fraude para el profesorado, una estafa para las familias, un paso atrás del sistema educativo, una oportunidad perdida para todos los españoles en edad escolar.
Parecía que, tras los malos resultados evidenciados por el Informe PISA, se apostaría por la mejora de la calidad, por superar el grave fracaso escolar que padecen nuestros alumnos, por un mínimo de exigencia educativa. No ha sido así.
Confiábamos en que, tras el pronunciamiento mayoritario del Consejo Escolar del Estado contra la inclusión de la asignatura “Educación para la Ciudadanía”, ésta se suprimiría. Tampoco ha sido así.
Esperábamos que, tras los más de tres millones de firmas que CONCAPA presentó sobre la enseñanza de la Religión, se tendría en cuenta la voluntad de las familias y esta asignatura recibiría el mismo trato que las demás. Finalmente, no ha sido así.

Otro objetivo incumplido de su reforma era prestigiar el papel del profesorado. No cabe duda de que con la “genialidad” de sus medidas la profesión docente ha quedado irremediablemente desprestigiada: posibilidad de los alumnos de faltar a clase, promoción de curso con tres suspensos, falta de pruebas objetivas que evalúen los conocimientos del estudiante –especialmente la reválida, presente en la mayor parte de los países europeos-, ausencia de medidas para suprimir la violencia en las aulas, etc.
Ha discriminado la escuela concertada y no ha conseguido prestigiar la escuela pública, puesto que conceder aprobados devaluados y un titulo de Bachiller degradado impide la promoción social de los más desfavorecidos, que no podrán contar con una buena formación que les permita competir con sus compañeros europeos.
Todo ello agravado por la situación originada en las diversas autonomías desde la LOGSE, tanto en cuestión de contenidos como de financiación, que en lugar de homologar contribuye a acentuar la creación de 17 sistemas educativos distintos, lo que dificultará gravemente que los alumnos puedan homologar sus estudios si sus familias se ven obligadas a residir en otra Comunidad Autónoma.

Por su manifiesta incapacidad para lograr un acuerdo educativo que propicie una ley que mejore la enseñanza en nuestro país, afrontando los graves problemas que padecemos (fracaso escolar, falta de autoridad en el profesorado, violencia escolar, recorte de las libertades constitucionales, etc.), y por haber ignorado las demandas de padres, profesores y alumnos, conduciéndonos a una encrucijada educativa que llevará a nuestros hijos a ocupar los peores puestos de trabajo en Europa, le solicitamos expresamente su dimisión. Consideramos que es lo mejor que puede hacer Vd. por el bien de la comunidad educativa y de la educación española.

Daremos traslado de esta carta a los medios de comunicación y al presidente Gobierno, aún a sabiendas de que, posiblemente, ni Vd. ni el presidente comprenderán que su obligación consiste en servir al país mejorando la formación y educación de nuestros hijos en lugar de adoctrinarlos, puesto que la educación es un derecho primigenio y preferente de los padres y no del Estado, que tan sólo debe ser garante del mismo.

CONCAPA manifiesta que, dado el proverbial talante de nuestro presidente de Gobierno y de la ministra de Educación -que no han tenido en cuenta ni los más de tres millones de firmas, ni la opinión del Consejo Escolar del Estado ni el dictamen del Consejo de Estado-, todo tipo de acciones son legítimas para modificar este proyecto de LOE, que atenta contra la libertad de enseñanza, el derecho a la libre elección de centro y el derecho de los padres a educar a sus hijos conforme con sus convicciones.
CONCAPA anima a personas e instituciones a solicitar también la dimisión de la ministra de Educación que, aprovechando las vacaciones de muchas de las familias españolas y con la significativa ausencia del Presidente de Gobierno, ha aprobado un proyecto de LOE que perjudicará gravemente la formación que reciban los alumnos en edad escolar.

A la espera de su respuesta, le saluda cordialmente
Luis Carbonel Pintanel
Presidente Nacional de CONCAPA